Diapositiva 1: Introducción.

            En este capítulo se desarrolla como el vehículo eléctrico y la inteligencia artificial están creando una demanda eléctrica tan alta que puede acabar con la transición ecológica.

Diapositiva 2: Demanda de electricidad.

• La demanda de electricidad se está disparando.

            Por el desarrollo de la inteligencia artificial, las fábricas de baterías, los grandes centros de datos, y el vehículo eléctrico.

            Y hay países que puede que no estén preparados para esta realidad. Uno de ellos es EE.UU.     

• Toda esta demanda de energía no solo está poniendo al límite las redes eléctricas, sino que está tirando por tierra los objetivos climáticos.

            Según un análisis del The New York Times, que ha dado la voz de alarma ante lo que creen que es un punto de inflexión.

• La energía se genera en unos pocos y determinados lugares.

            Sin embargo, nuestros hogares, empresas y fábricas con aire acondicionado están por todas partes.

            El problema no es tanto que consumamos mucho, sino que lo hagamos todos al mismo tiempo. Es en las horas más cálidas, donde todo el mundo pone el aire acondicionado y se genera más demanda.

            La red eléctrica de cualquier país no está diseñada para poder soportar una enorme demanda sincronizada, todos al mismo tiempo, de forma puntual sino en función de la diversidad de la demanda.

            Son las líneas de alta tensión, y las otras, las encargadas de llevar la energía desde las centrales de producción a todos los rincones del país. Esas líneas, sin embargo, no dejan de ser cables y tienen una capacidad limitada.

• El problema es que su capacidad disminuye cuando hace calor.

            Esto se agrava por el hecho de que, cuanta más energía transporte, más se calienta. El conductor metálico de la línea se expande y llega a provocar su caída. En los casos extremos, si la línea cae demasiado, puede entrar en contacto con el suelo, lo que provoca un cortocircuito y pone fin a la capacidad de la línea para transportar energía.

            Y en estos episodios tampoco podemos recurrir a las energías renovables, como la eólica o la hidroeléctrica.

            Aquí es donde toman el relevo otros centros de producción, como las nucleares, las térmicas y las de gas.

            Con esa línea fuera de servicio, otras líneas tienen que recoger la carga, pero también se sobrecargan y son propensas al mismo problema. Además, a medida que aumenta la cantidad de energía que transportan estas líneas, también aumenta la cantidad de energía que se pierde a través de ellas debido al calor.

            En este escenario, los pronósticos no son muy favorables en EE.UU: Se prevé que la demanda máxima en verano crecerá en 38.000 megavatios en todo el país en los próximos cinco años, según un análisis de la consultora Grid Strategies , lo que es como añadir otra California a la red, detalla el periódico.

Diapositiva 3: Hace demasiado calor y cada vez hay más centros que demandan energía las 24 horas.

• EE.UU se está encontrando con un buen problema en su red eléctrica.
  

            Los centros de datos, criptominería y la expansión de la inteligencia artificial de la mano de gigantes como Amazon, Apple, Google o Microsoft están catapultando la débil red eléctrica en Estados como Georgia, donde la demanda es ahora 17 veces mayor que hace un década. Sin hablar de los problemas que enfrenta Texas, la sartén de Norteamérica.

• Tesla pidieron a sus clientes no recargar las baterías de sus coches en las olas de calor del verano pasado.
  

            Como fue el caso de Texas, el Electric Reliability Council of Texas, solicitó a los residentes que limitasen el uso de la electricidad entre las dos de la tarde y las ocho de la noche durante la reciente ola de calor. El sistema está siendo llevado a extremos que podrían provocar el racionamiento de la electricidad.

• En California los vehículos eléctricos pronto podrían representar el 10% de la demanda máxima de energía.
  

            Se prevé que el mercado mundial de infraestructura de carga de vehículos eléctricos alcance los 125.390 millones de dólares en 2030, de los 25.000 actuales.

Diapositiva 4: Demanda de electricidad.

• Un estudio del Laboratorio Nacional de Energía Renovable.
  

            Estimó que para satisfacer las necesidades de carga previstas para 2030 se necesitará una inversión acumulada de entre 31.000 y 55.000 millones de dólares, para alrededor de 1,2 millones de unidades de carga accesibles al público, además de unos 28 millones de unidades de carga domésticas.

Diapositiva 5: La paradoja del vehículo eléctrico.

• Y aquí es donde volvemos a la paradoja del vehículo eléctrico, que incluye fábricas de semiconductores y baterías, pues su demanda también está contribuyendo a un aumento sin precedentes de la electricidad.
  

            Para satisfacerla y evitar un escenario de apagones, las empresas de servicios públicos en estados como Georgia, Carolina del Norte, Carolina del Sur, Tennessee y Virginia, están proponiendo construir docenas de plantas de energía durante los próximos 15 años que quemarían gas natural.

            Algo que no ayudaría al objetivo de descarbonización de EE.UU de generar toda la electricidad a partir de fuentes libres de contaminación, como la eólica, la solar y la nuclear, para 2035.

Diapositiva 6: Energías renovables.

• Una vez más, el problema está en la pesadilla burocrática que envuelve a las renovables.     
       
•  Un centro de datos se puede construir en sólo un año, puede llevar cinco años o más conectar proyectos de energía renovable a la red, y una década construir algunas de las líneas eléctricas de larga distancia que requieren.

• De acuerdo a los datos recogidos por The Washington Post, los 2.700 centros de datos de Estados Unidos.
•             Consumieron más del 4% de la electricidad total del país en 2022, según la Agencia Internacional de Energía.

            Y para 2026 será el 6%.

• Así que la solución pasa por aliviar los trámites para instalar más energía renovable.

            Más líneas de trasmisión de alto voltaje, rejuvenecer la red eléctrica y aún más importante, limitar el número de centros de datos y de fábricas en un mismo Estado, solo en Virginia se han abierto al menos 75 centros de datos desde 2019.

Diapositiva 7: Flotas de vehículos.

• Ciclo neto de emisiones cero. 
  

            El ciclo neto de emisiones son las emisiones contaminantes desde que la electricidad es generada hasta el consumo en el vehículo eléctrico.

            Actualmente las diferentes normas internacionales no se incluye las emisiones contaminantes de la fabricación del vehículo, y la fabricación y reciclaje de la batería.

            Si está electricidad se genera con combustibles fósiles, el ciclo neto de emisiones del vehículo eléctrico no es cero, el vehículo contamina por la generación de energía.

            Para conseguir que el ciclo neto de emisiones en un vehículo eléctrico sea cero, hay que consumir energía generada por energías renovables como la eólica, solar, o hidráulica.

• La paradoja del vehículo eléctrico.

            Se adquieren vehículos eléctricos en la flota para tener un ciclo de emisiones cero, pero se contamina por la generación de la electricidad si se genera con combustibles fósiles, además de la fabricación del vehículo, y la fabricación y reciclaje de las baterías.

            Actualmente los fabricantes de vehículos eléctricos están realizando inversiones para que la energía consumida en la fabricación del vehículo, y la fabricación y reciclaje de las baterías sea de energías renovables.

• Cambio climático.

            Debido al cambio climático cada vez se producen más olas de calor, que pueden sobrecargar la red eléctrica, y producir el racionamiento de la electricidad en determinadas horas del día.

            En todo caso, no es que la carga de coches eléctricos vaya a provocar la caída de la red eléctrica, pero a medida que éstos sean cada vez más numerosos y las olas de calor más habituales, podríamos ver en un futuro mensajes similares a los de Tesla en Texas. El objetivo será evitar que haya demasiada demanda simultánea, y prevenir un racionamiento o el colapso.

            Sí tenemos vehículos eléctricos en la flota, hay que tener un plan de emergencia de recarga en olas de calor, hay que tener en consideración que si no se pueden utilizar los vehículos no se puede prestar el servicio.

            Por la noche la demanda agregada de la red eléctrica es el mínimo, y no hay cortes de suministro.

            En una flota de vehículos siempre hay que recargar los vehículos en nuestras instalaciones, no se recomienda recargar en cargadores públicos o de terceros, porque pueden no funcionar, estar ocupados, y el tiempo de la recarga que no se está utilizando el vehículo para prestar el servicio.

            Se recomienda siempre recargar siempre de noche en la tarifa más económica, y con la carga más lenta posible para no degradar la batería.

            Una solución es tener en nuestras instalaciones paneles solares y baterías estacionales para almacenar energía proveniente de la energía solar y de la red eléctrica  en caso del corte de suministro,  es una solución cara, pero puede ser factible si hay muchos cortes de suministro con las olas de calor, o en aquellos países con muchos cortes de suministro como los países subdesarrollados. 

            Otra solución es tener generadores de electricidad para recargar los vehículos, está solución es de emergencia y contamina. 

Diapositiva 8: Gracias por su atención.

            En este capítulo se ha desarrollado como la inteligencia artificial, las fábricas de baterías, los grandes centros de datos y el vehículo eléctrico, están disparando el consumo de energía, que puede que el ciclo neto de emisiones de los vehículos eléctricos no sea cero si la energía proviene de combustibles fósiles, y hay que tener un plan de emergencia para recargar los vehículos eléctricos en caso de olas de calor y el corte de suministro eléctrico, hasta pronto.