Diapositiva 1. Introducción.
La clase desarrolla que es el sistema OBD, para qué sirve, por qué es clave en el mantenimiento y la ITV y las implicaciones en la gestión de la flota.
Diapositiva 2. El sistema OBD.
- ¿Qué es el sistema OBD y cómo funciona?.
La mecánica de los automóviles ha evolucionado significativamente, dejando de depender de la intuición o de pruebas a ciegas. En la actualidad, resulta imperativo conocer el sistema OBD en un vehículo, ya que permite identificar averías de manera rápida y precisa, garantizando así el mantenimiento adecuado de los mismos. En lugar de desmontar piezas de manera aleatoria, este sistema electrónico ofrece un diagnóstico confiable que ahorra tiempo, reduce costos y aumenta la seguridad en carretera.
El término OBD proviene de On Board Diagnostics, que en español significa «diagnóstico a bordo». Se trata de un sistema electrónico que recopila información del vehículo a través de sensores estratégicamente ubicados en el motor y en otras piezas fundamentales.
Esto permite identificar el origen de la avería con rapidez, facilitando reparaciones más baratas y precisas. Entre los problemas detectados se incluyen desde fallos en las emisiones hasta incidencias electrónicas relacionadas con el control de estabilidad.
Una de las principales ventajas del sistema OBD es su capacidad para asignar códigos específicos a cada tipo de fallo detectado. Estos códigos, denominados códigos de diagnóstico de fallos, DTC por sus siglas en inglés, facilitan la identificación precisa del problema. Esta codificación estandarizada permite a los técnicos diagnosticar y reparar de manera más eficiente los problemas del vehículo.
El sistema OBD desempeña un papel fundamental en la reducción de las emisiones contaminantes. Al realizar un monitoreo constante de los sistemas del vehículo, el OBD puede identificar cualquier irregularidad que pueda incrementar las emisiones y notificar al conductor a través de una luz de advertencia en el salpicadero. Esta medida permite implementar acciones correctivas oportunas, contribuyendo así a la protección del medio ambiente y al cumplimiento de las normativas de emisiones.
- Evolución del sistema OBD.
El OBD (On-Board Diagnostics) fue desarrollado a finales de la década de los ochenta en Estados Unidos, con el propósito inicial de supervisar las emisiones contaminantes. Con el paso del tiempo, su alcance se ha expandido progresivamente hasta abarcar la gran mayoría de los sistemas del vehículo.
La versión más extendida es la OBD II, obligatoria en Europa desde principios de los 2000. Este estándar permitió la estandarización de conectores y códigos de error, facilitando el acceso tanto a talleres como a conductores particulares.
En la actualidad, la diagnosis está experimentando un notable avance hacia la conectividad, con numerosos vehículos transmitiendo datos en tiempo real a través de internet. Esta evolución abre la puerta a un control más exhaustivo del estado del vehículo y a mantenimientos predictivos, lo que redunda en una mayor eficiencia y seguridad.
La evolución del sistema OBD ha sido la siguiente.
- OBD I, años 80-90.
Ø Cobertura de fallos: Limitada, principalmente emisiones.
Ø Conector: No estandarizado, variaba según fabricante.
Ø Acceso al usuario: Solo talleres autorizados.
Ø Detección de errores: Muy básica, códigos genéricos poco detallados.
Ø Utilidad en ITV: No aplicaba.
- OBD II, desde 1996 en adelante.
Ø Cobertura de fallos: Motor, emisiones, transmisión, frenos, airbag, ESC.
Ø Conector: Estándar de 16 pines, situado bajo el volante.
Ø Acceso al usuario: Lectores básicos disponibles para particulares.
Ø Detección de errores: Códigos más específicos, lectura multimarca.
Ø Utilidad en ITV: Obligatorio desde 2018 en vehículos Euro 5 y 6.
- Diagnosis presente, conectada.
Ø Cobertura de fallos: Todos los sistemas del coche, incluidos asistentes ADAS.
Ø Conector: Igual estándar, con posibilidad de conexión remota vía WiFi/4G.
Ø Acceso al usuario: Apps móviles y diagnósticos online en tiempo real.
Ø Detección de errores: Datos en vivo, telemetría y actualización OTA.
Ø Utilidad en ITV: Verificación remota y más exhaustiva prevista a futuro.
- Lectores de código: diagnóstico para todos.
Actualmente, cualquier persona puede adquirir un lector OBD II por menos de 20 euros. Estos dispositivos portátiles, diseñados para una máxima funcionalidad, se conectan al puerto y permiten revisar fallos comunes, emisiones y parámetros básicos.
Aunque no reemplazan a los equipos profesionales de taller, constituyen una herramienta valiosa para realizar un primer diagnóstico desde el hogar y comprender las causas del encendido del testigo de avería del motor.
Por su parte, los talleres utilizan máquinas de lectura avanzada, capaces de interpretar los códigos específicos de cada fabricante, lo que les permite realizar modificaciones en los parámetros.
- El papel del sistema OBD en la ITV.
El Real Decreto 920/2017 estableció la obligatoriedad de emplear la tecnología OBD en las inspecciones técnicas de vehículos. A partir de mayo de 2018, los vehículos de categoría Euro 5 y Euro 6 deben estar equipados con un conector operativo para su inspección en la ITV.
- Emisiones contaminantes,
- Kilometraje,
- Estado de airbags y frenos,
- Control de estabilidad (ESC),
- Otros sistemas electrónicos clave.
Según el informe de AECA-ITV, durante el primer año de implementación, aproximadamente 180.000 vehículos en España no lograron superar la inspección debido a fallos detectados a través de la función OBD. Esto subraya la importancia de esta función para la seguridad vial y el medio ambiente.
- El futuro del sistema OBD
La evolución es un proceso continuo e ininterrumpido. Se prevé que en un plazo de tiempo reducido, el sistema OBD facilite el diagnóstico de componentes avanzados, tales como asistentes de conducción ADAS, reguladores de velocidad adaptativos y sistemas de visión nocturna.
- Implicaciones en la gestión de la flota.
La utilización del sistema OBD son todo ventajas porque permite conocer las averías y fallos del vehículo, y poder actuar para corregirlas.
Es fundamental para realizar el mantenimiento preventivo, y tener el vehículo en apropiadas condiciones de utilización.
Si tenemos taller propio se recomienda tener una máquina de diagnostico OBD para los vehículos de la flota, y el personal cualificado para manejarla.
Hay que impartir formación constante a nuestros trabajadores en el sistema de diagnosis OBD, por que esta tecnología evoluciona en el tiempo.
Hay que tener en cuenta que no se puede pasar la ITV si existen fallos detectados vía OBD.
En resumen, el sistema OBD es una herramienta esencial en la gestión y mantenimiento de los vehículos modernos. Su capacidad para detectar y diagnosticar fallos de manera rápida y precisa no solo mejora la eficiencia del mantenimiento, sino que también contribuye a la reducción de emisiones contaminantes, beneficiando tanto a los conductores como al medio ambiente.
Diapositiva 3. Gracias por su tiempo.
La clase ha desarrollado que es el sistema OBD, para qué sirve, por qué es clave en el mantenimiento y la ITV, y las implicaciones en la gestión de la flota, hasta pronto.
Descarga el audio
Escrito por José Miguel Fernández Gómez