Diapositiva 1. Introducción.
La clase desarrolla la importancia de la tarifa eléctrica en la reducción de los costes del vehículo eléctrico, y las implicaciones en la gestión de la flota.
Diapositiva 2. Elegir bien la tarifa de la electricidad.
Es imprudente asegurar que moverse en coche eléctrico es más barato que hacerlo en uno de combustión interna. Y es que es algo que depende de muchísimos factores, desde el modelo de coche, hasta el precio del combustible y, por supuesto, de la electricidad, pero, por lo general, suele ser cierto. Se puede demostrar con números.
La consultora energética Cornwall Insight ha hecho un estudio para arrojar un poco más de luz sobre esta cuestión, y su conclusión es clara: en el peor de los casos, los propietarios de un coche eléctrico pagan 630 libras al año, unos 740 euros al cambio, mientras que los dueños de un coche de gasolina se gastan 1.432 libras al año en combustible, el equivalente a unos 1.685 euros.
- Elegir bien la tarifa de la electricidad, cuándo cargar y dónde cargar es clave para reducir costes.
Son alrededor de 945 euros de ahorro de media, pero Cornwall Insight asegura que se puede ahorrar todavía más si se aprovechan bien las tarifas de luz. Para hacer estos cálculos, Cornwall Insight ha tenido en cuenta un kilometraje anual de 11.265 kilómetros, pero la consultora señala que el ahorro puede ser mayor con un kilometraje más elevado, de al menos 16.000 kilómetros al año; en este último caso, usar un coche eléctrico puede suponer un ahorro de algo más de 2.000 euros al año.
El estudio se ha realizado con una eficiencia del vehículo eléctrico de 4,8 kilómetros/Kilovatios-hora, un consumo de 20,83 Kilovatios-hora cada 100 kilómetros, que es el consumo de un SUV o turismo eléctrico.
Y con una eficiencia del vehículo de motor de combustión interna de 12,69 kilómetros por litro, un consumo de 7,87 litros cada 100 kilómetros, que es el consumo de un turismo de gama media.
La recarga más económica es la que se produce en nuestras instalaciones, fuera del pico de demanda más alto, es en la tarifa valle durante la noche.
Le sigue la recarga en nuestras instalaciones con la tarifa normal, durante el día.
Las recargas en puntos de recarga públicos o de terceros son más caras que las de nuestras instalaciones, para cualquier tipo de velocidad de recarga, pero menor que un vehículo con motor de combustión interna.
Cuanta más rápida es la recarga en puntos de recarga públicos o de terceros más cara es.
La recarga ultrarrápida en puntos de recarga públicos o de terceros es incluso más cara que un vehículo con motor de combustión interna.
Un aspecto muy importante es que Cornwall Insight dice que el 82% de los conductores de vehículos eléctricos no están aprovechando las tarifas más rentables, por lo que si se eligen bien las tarifas, las recargas pueden ser más económicas.
Es algo que se puede aplicar a las recargas en puntos de carga públicos, y a las recargas en nuestras instalaciones porque existen multitud de tarifas en los dos casos, no solo entre los distintos operadores, sino también en el mismo operador.
En la mayoría de compañías hay diferentes tarifas de luz para nuestras instalaciones. Por ejemplo, la compañía eléctrica española Iberdrola ofrece a sus clientes cuatro planes de luz con diferentes precios para la energía consumida y para la potencia. Por ejemplo, con su denominado Plan Estable, el kWh se paga a 0,138 euros a cualquier hora y cualquier día a la semana, mientras que, con su Plan Ahorro Inteligente, el kWh se paga a 0,191 euros en horas punta y a 0,095 euros en horas llano. Eso significa que cargar un coche eléctrico en nuestras instalaciones, puede ser mucho más barato en función de la tarifa escogida y en función de la hora.
Por ejemplo en España, la discriminación horaria para las tarifas de la luz tiene tres franjas: punta, llano y valle. Las horas punta son las de mayor demanda de energía, generalmente de 10:00 a 14:00 y de 18:00 a 22:00 entre semana. Las horas llano son las de demanda intermedia, normalmente, de 9:00 a 10:00, de 14:00 a 18:00 y de 22:00 a 00:00 entre semana. Las horas valle son las de menor demanda, generalmente de 00:00 a 8:00 entre semana, y todo el día los fines de semana y festivos.
Hay tarifas de la luz que varían en función de estas franjas y con las que el kWh se paga más barato en horas valle. Otras tarifas no atienden a la discriminación horaria y tarifican el kWh al mismo precio todos los días y a todas las horas.
En función de sus necesidades, el usuario de un coche eléctrico que cargue a menudo en sus instalaciones puede ahorrarse bastante dinero al año si elige bien la tarifa. Para una flota que pueda cargar a diario de noche, lo más rentable es elegir una tarifa que cobre mucho más barato el kWh en horas valle. También hay tarifas específicas diseñadas para ahorrar al cargar un coche eléctrico.
“Las tarifas específicas de vehículos eléctricos, que recompensan a las flotas por cargar de la noche a la mañana, cuando la demanda de electricidad es baja, pueden reducir drásticamente los costes del vehículo eléctrico. Sin embargo, no están bien para todos”, dice Cornwall Insight, aunque avisa de que no a todo el mundo le interesa tener estas tarifas: “Algunos planes especiales para vehículos eléctricos vienen con tarifas máximas más altas y contratos de permanencia, lo que significa que las flotas necesitan ser conscientes de cómo y cuándo usan la electricidad de manera más amplia”.
Si volvemos a hacer números, queda claro que recargar en puntos públicos es mucho más caro que hacerlo en nuestras instalaciones y que también es importante elegir bien las tarifas.
Podemos volver a tomar como ejemplo la compañía eléctrica Iberdrola; en su red de recarga pública, esta compañía tiene diferentes tarifas y cobra el kWh a 0,25 euros en sus puntos de carga limitados a una potencia máxima de 22 kW, mientras que uno que carga a un máximo de 120 kW cobra el kWh a 0,6 euros.
De esta forma, cargar por completo un coche con una batería de 50 kWh de capacidad en el primer cargador costaría 12,5 euros, mientras que cargarlo en el punto de 120 kW costaría 30 euros. Hablamos únicamente de coste, no del tiempo que se necesita en uno y otro.
- Implicaciones en la gestión de la flota.
- Localización de los puntos de recarga de la flota.
El coste de la recarga más económico es en nuestras instalaciones, y el más caro es en los puntos de recarga públicos o de terceros, y además si utilizamos la recarga rápida el coste se dispara.
Los vehículos eléctricos de la flota se tienen que recargar en nuestras instalaciones para asegurarnos la utilización de los vehículos, no se recomienda recargar en puntos de recarga de terceros, públicos etc. porque pueden no estar en servicio, o ocupados, y por lo tanto tendríamos serios problemas para utilizar nuestros vehículos para prestar el servicio.
En los puntos de recarga públicos o de terceros no tenemos el control de la ciberseguridad, y por lo tanto se está corriendo un riesgo de sufrir un ciberataque, por lo que no se recomienda utilizarlos.
En nuestras instalaciones tenemos el control de recarga de los vehículos, y controlamos que trabajadores utilizan los cargadores.
Por estas razones se recomienda tener los puntos de recarga en nuestras instalaciones.
- Elección de la tarifa de la electricidad.
Se puede conseguir una reducción de los costes de recarga de los vehículos eléctricos si se elige apropiadamente la compañía eléctrica, y la tarifa de la electricidad.
En compañías en que la flota es su principal activo como compañías de transporte, logística, taxis, o carsharing el mayor consumo energético de la compañía es la flota, y se tiene que establecer la tarifa de electricidad de la compañía para obtener el menor coste de recarga.
En compañías en que la flota no es su principal activo, y se utiliza para la movilidad de los empleados o comerciales, el consumo energético de la flota no es el mayor consumo de la compañía, y en el establecimiento de la tarifa de la electricidad tiene menor influencia.
Hay que tener en cuenta que la electrificación de la flota es incipiente en muchas compañías, y tienen unos pocos vehículos eléctricos, que influirán muy poco en la elección de la tarifa eléctrica de la compañía, pero que en los próximos años se electrificarán por completo, y será el principal motivo del establecimiento de la tarifa eléctrica.
Se recomienda negociar directamente con una compañía eléctrica nuestra tarifa al menos por un año de duración, y solicitar una oferta al menos a 3 compañías eléctricas diferentes. Puede ocurrir que haya unas pocas compañías eléctricas que nos puedan suministrar la electricidad porque el mercado eléctrico es un oligopolio, como ocurre en España.
Se tiene que negociar por toda la energía de nuestra compañía, tanto de los vehículos eléctricos como de las instalaciones y oficinas para tener el mayor poder de negociación y conseguir el kilovatio hora más económico. Además se puede llegar a un porcentaje de descuento por el total del consumo anual.
Lo ideal en una flota es recargar por la noche lo más lento posible para tener la tarifa y recarga más económica, pero en algunas flotas no es posible.
Hay que negociar la tarifa por tramos horarios del día, teniendo la tarifa más económica cuando nuestros vehículos eléctricos recargan.
Hay que realizar una estimación del consumo total de la flota y de las instalaciones y oficinas, y calcular una estimación del coste total de la energía de la compañía para diferentes tarifas.
Como gestores de flota nuestro objetivo es obtener el coste de recarga más económico, para que el coste de propiedad del vehículo sea el mínimo posible, pero no es siempre posible.
Podemos tener una tarifa muy económica durante la noche para recargar los vehículos eléctricos, pero durante el horario de las instalaciones y oficinas una tarifa más cara de la que teníamos anteriormente, y el total del coste de la energía de la compañía incrementarse.
Hay que tener en consideración si la tarifa eléctrica tiene contrato de permanencia, porque durante todo ese periodo tendremos la misma tarifa o no podremos cambiar de compañía eléctrica, al menos que paguemos una indemnización a la compañía eléctrica por el cambio. Se puede incluir en el acuerdo de permanencia un número de cambios de la tarifa eléctrica sin penalización.
Hay que tener en consideración que normalmente la elección de la tarifa de la electricidad de la compañía no la realiza el gestor de flota, y suele ser establecida por el director de operaciones, o el director financiero, o el director general, pero el gestor de flota tiene que dar su opinión de cual es la mejor tarifa para la flota.
Cuando no se negocia directamente con la compañía eléctrica para llegar a un acuerdo, o no se llega a un acuerdo, hay que conocer las tarifas de al menos 3 compañías eléctricas y elegir la que mejor se adapte a nuestra compañía. Hay compañías que tienen tarifas establecidas para vehículos eléctricos, y que suelen ser por la noche.
- Energía generada con energías renovables.
El principal motivo para el cambio a una flota eléctrica es para conseguir las cero emisiones netas, no contaminar en la generación de la energía, y en la utilización del vehículo.
Para que todo el ciclo tenga cero emisiones netas la energía consumida por los vehículos eléctricos tiene que ser generada por energías renovables como la solar, eólica, hidráulica, geotérmica, mareomotriz, o undimotriz.
Hay que elegir la compañía eléctrica que nos suministre toda la energía procedente de energías renovables, e incluir en el acuerdo penalizaciones por cada kilovatio hora que no proviene de energías renovables.
Normalmente las propias compañías eléctricas suministran la información de como la energía es generada.
Hay compañías eléctricas que generan toda su electricidad de energías renovables pero hay otras compañías eléctricas que tienen un mix de generación de electricidad utilizando por ejemplo energías renovables, gas natural, carbón o energía nuclear.
Diapositiva 3. Gracias por su atención.
La clase ha desarrollado la importancia de la tarifa eléctrica en la reducción de los costes del vehículo eléctrico, y las implicaciones en la gestión de la flota, hasta pronto.
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Escrito por José Miguel Fernández Gómez.




















